Avellana cruda con piel

La avellana cruda con piel es un fruto seco delicioso y nutritivo que destaca por su sabor suave, ligeramente dulce y su textura crujiente. Al ser cruda y mantener su piel, conserva todos sus nutrientes intactos, lo que la convierte en una opción ideal para quienes buscan incorporar alimentos naturales y ricos en beneficios a su dieta. La piel de la avellana, al igual que la de otros frutos secos, es rica en fibra y antioxidantes, lo que proporciona propiedades adicionales para la salud.

Beneficios y Propiedades

• Grasas saludables: Las avellanas crudas con piel son una excelente fuente de grasas monoinsaturadas, que ayudan a reducir el colesterol LDL (colesterol malo) y mejorar la salud cardiovascular.

• Antioxidantes naturales: La piel de la avellana contiene antioxidantes, como la vitamina E, que protegen las células del daño causado por los radicales libres, promoviendo la salud de la piel y ayudando a prevenir el envejecimiento prematuro.

• Ricas en fibra: Gracias a su piel, las avellanas crudas son una excelente fuente de fibra, lo que favorece el buen funcionamiento digestivo, regula el tránsito intestinal y proporciona una sensación de saciedad.

• Proteínas vegetales: Las avellanas son una buena fuente de proteínas vegetales, esenciales para la reparación y el crecimiento de tejidos, así como para el funcionamiento general del cuerpo.

• Minerales esenciales: Este fruto seco es rico en minerales como el magnesio, fósforo, calcio, potasio y zinc, que son importantes para la salud ósea, la función muscular y el sistema inmunológico.

• Control del azúcar en sangre: Las avellanas tienen un bajo índice glucémico, lo que las hace ideales para controlar los niveles de azúcar en sangre y mantener un equilibrio glucémico estable.

Usos Culinarios

• Como snack saludable: Las avellanas crudas con piel son ideales para consumir como snack entre comidas, proporcionando una combinación perfecta de grasas saludables, proteínas y fibra para mantener la energía y la saciedad durante el día.

• En ensaladas: Agrega avellanas crudas con piel a tus ensaladas para un toque crujiente y nutritivo. Combinan bien con ingredientes frescos como espinacas, queso de cabra, manzana o aguacate.

• En repostería: Puedes incorporarlas en la elaboración de galletas, pasteles, granola o panes. Su sabor suave y su textura crujiente las hacen perfectas para dar un toque natural y delicioso a tus postres caseros.

• En batidos y smoothies: Añadir avellanas crudas con piel a tus batidos o smoothies dará un toque de cremosidad y enriquecerá tu bebida con grasas saludables, proteínas y antioxidantes.

• En platos salados: Las avellanas crudas con piel también pueden ser utilizadas en platos salados, como salsas, curris, arroces o sopas, aportando un toque crujiente que contrasta muy bien con ingredientes especiados o picantes.

• Leche de avellana casera: Remoja las avellanas crudas con piel durante la noche, licúalas con agua y cuela el líquido resultante para obtener una leche vegetal casera, ideal para quienes buscan evitar los lácteos o desean opciones más saludables.

Preparación

• Consumir crudas: Las avellanas crudas con piel son perfectas para comer directamente como un snack saludable. Su sabor natural y su textura crujiente las hacen ideales para disfrutar entre horas.

• Tostado en sartén: Si prefieres un sabor más profundo, puedes tostar las avellanas ligeramente en una sartén a fuego bajo durante unos 5-10 minutos, removiendo constantemente para evitar que se quemen.

• Mantequilla de avellana casera: Para hacer mantequilla de avellana, simplemente coloca las avellanas crudas con piel en un procesador de alimentos y procésalas hasta obtener una pasta suave y cremosa. Si prefieres una textura más líquida, puedes añadir un poco de aceite de coco o agua.

Información Nutricional (por 100 g de avellanas crudas con piel)

• Energía: 628 kcal

• Grasas: 60.0 g (de las cuales 4.5 g son saturadas)

• Carbohidratos: 16.7 g (de los cuales 4.4 g son azúcares)

• Fibra: 9.7 g

• Proteínas: 14.1 g

• Minerales:

• Magnesio: 163 mg

• Fósforo: 290 mg

• Calcio: 114 mg

• Potasio: 680 mg

• Zinc: 2.4 mg

• Vitamina E: 15 mg

Las avellanas crudas con piel son una fuente natural y potente de nutrientes esenciales, como grasas saludables, proteínas, fibra, antioxidantes y minerales. Al mantener su piel, no solo conservan más nutrientes, sino que también ofrecen beneficios adicionales para la salud digestiva y cardiovascular. ¡Haz de las avellanas crudas con piel un alimento básico en tu dieta y disfruta de todos sus beneficios naturales!