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Lenteja castellana de Salamanca
Lenteja castellana de Salamanca
La lenteja castellana de Salamanca es una variedad autóctona originaria de la provincia de Salamanca, en la región de Castilla y León. Este tipo de lenteja es muy apreciado por su tamaño medio, su forma redondeada y su característico color verde claro con algunas tonalidades marrones. Es conocida por su textura tierna y su sabor suave y delicado, que la hace ideal para platos tradicionales de la cocina castellana, como sopas, guisos y potajes. Su capacidad para absorber los sabores de los caldos la convierte en una legumbre muy versátil.
• Tamaño: Medio, redondeado, con una forma ligeramente achatada.
• Color: Verde claro con toques marrones o dorados, lo que le da un aspecto muy característico.
• Textura y sabor: La lenteja castellana tiene una textura suave y cremosa al cocerla, manteniendo su forma sin deshacerse. Su sabor es delicado, ligeramente terroso, lo que la hace ideal para platos de cuchara y guisos.
Propiedades y Beneficios
• Rica en fibra: La lenteja castellana de Salamanca es una excelente fuente de fibra, que favorece el tránsito intestinal, ayuda a prevenir el estreñimiento y contribuye a la salud digestiva.
• Proteínas vegetales: Esta variedad de lenteja es rica en proteínas vegetales, esenciales para el crecimiento y la reparación de los tejidos, lo que la convierte en una excelente opción para dietas vegetarianas y veganas.
• Minerales esenciales: Contiene minerales como hierro, magnesio, fósforo y potasio, necesarios para el buen funcionamiento del organismo, la salud ósea y la circulación sanguínea.
• Bajas en grasas: Con un bajo contenido en grasas, especialmente grasas saturadas, la lenteja castellana es ideal para dietas equilibradas y para el control del peso corporal.
• Propiedades antioxidantes: La lenteja castellana tiene un contenido significativo de antioxidantes, que ayudan a proteger al organismo de los efectos del envejecimiento celular y de enfermedades crónicas.
• Control del azúcar en sangre: Gracias a su bajo índice glucémico, la lenteja castellana ayuda a regular los niveles de azúcar en sangre, siendo beneficiosa para personas con diabetes o que buscan mantener niveles de glucosa estables.
• Beneficios cardiovasculares: Su contenido en fibra y minerales, como el potasio, ayuda a regular la presión arterial y favorece la salud del corazón.
Cocción
1. Remojo previo: Se recomienda dejar las lentejas castellanas en remojo durante 6 a 8 horas antes de cocinarlas, aunque no es imprescindible, ya que son de cocción relativamente rápida.
2. Cocción: Después del remojo, escúrrelas y ponlas en una cacerola con agua fría (aproximadamente tres veces el volumen de las lentejas). La cocción suele durar entre 30 y 45 minutos a fuego lento. Se puede añadir sal, ajo, cebolla, laurel, zanahoria y otros ingredientes para mejorar el sabor del guiso o la sopa.
3. Cocción en olla a presión: Si se utiliza una olla a presión, el tiempo de cocción se reduce a unos 15-20 minutos.
4. Platos típicos: La lenteja castellana es perfecta para platos tradicionales como el potaje de lentejas, lentejas con chorizo, sopas de lentejas y guisos de cuchara. Su capacidad para absorber los sabores de los ingredientes la convierte en una base ideal para platos reconfortantes y nutritivos.
Valor Nutricional (por cada 100 g de lentejas castellanas cocidas)
• Energía: 116 kcal
• Proteínas: 9.0 g
• Grasas: 0.4 g
• Grasas saturadas: 0.1 g
• Carbohidratos: 20.1 g
• Azúcares: 0.5 g
• Fibra: 7.9 g
• Sodio: 2 mg
• Potasio: 370 mg
• Fósforo: 180 mg
• Hierro: 3.2 mg
• Magnesio: 45 mg
• Calcio: 30 mg
• Vitamina B9 (Ácido fólico): 90 mcg
• Vitamina C: 0 mg
Conclusión
La lenteja castellana de Salamanca es una legumbre de excelente calidad, con un sabor suave y una textura cremosa que la hace ideal para la cocina de cuchara tradicional de Castilla y León. Su alto contenido en fibra, proteínas vegetales y minerales esenciales la convierte en una opción muy nutritiva y saludable. Además, su bajo contenido en grasas y sus propiedades antioxidantes la hacen apta para una dieta equilibrada. Perfecta para platos como el potaje de lentejas o lentejas con chorizo, esta variedad es un alimento versátil y lleno de sabor que no puede faltar en la cocina de aquellos que aprecian las legumbres de calidad.